CAMINATA MUCUCHIES VALLE DE GAVIDIA LAGUNA LA VERDE LA MUCUY TABAY
El lugar de partida es Mucuchíes población que se recorre hasta el extremo que se corresponde con la salida hacia Barinas, se desvía hacia la derecha por carretera pavimentada que comunica con la aldea Gavidia en el valle de su mismo nombre, desde el inicio de la caminata se disfrutan paisajes hermosos, en los que se observa la actividad tradicional de los habitantes de la comarca en la medida en que se avanza por la carretera; se consiguen casas de diseño colonial español, algunas de las construcciones con más de cien años de data; las actividades agropecuarias de la localidad en la que sobresale la siembra de cultivos de hortalizas y de flores en los que el páramo es principal productor de Mérida y de Venezuela; el valle de Gavidia se distingue por las bellezas escénicas, de clima excelente, con facilidades para el hospedaje de turistas en posadas modestas, que cuentan con los mínimos recursos para hacer agradable la estadía de los turistas, lo más importante, la calidad y el calor de las personas que se manifiesta en el trato y cordialidad a los visitantes.
Se atraviesa el valle de Gavidia para iniciar el ascenso de poco declive que no está bien demarcado y sin señalización en todo el recorrido por lo que es conveniente y prudente informar a las autoridades de INPARQUES, a familiares y amigos la ruta a seguir, la mejor forma de orientarse en el sendero es seguir puntos del relieve que sirven de hitos para avanzar sin riesgos.
Desde la aldea de Gavidia hasta la laguna el sendero está bien demarcado, por lo que el extravío se reduce al mínimo, desde este depósito de agua se asciende por la montaña, se avanza por el lugar sin la existencia del camino, por lo que el próximo punto de referencia es el collado ( ventana) que se observa en dirección sur este del espejo de agua al frente, de este paso natural entre valles se desciende a la laguna de especial belleza, con visuales únicas, la soledad y lo prístino del lugar invita a la oración y reflexión, en este lugar se recomienda acampar para evitar la caminata en la tarde en la que la presencia de la neblina hace proclive la desorientación del senderista y en consecuencia se produce la pérdida en la montaña, la ruta es larga y extenuante por lo que es necesario conservar energías para asumir en buenas condiciones el resto de la jornada.
Al día siguiente se prosigue el esfuerzo, por lo que se avanza por la margen derecho de la laguna buscando el desagüe, en este punto se requiere prestar adecuada atención debido a que es necesario superar la pequeña quebrada, luego se bordea un pequeño promontorio rocoso que semeja un laberinto, algunas personas que desconocen este camino se extravían o se les dificulta el avance por el lugar correcto, luego de rodear el promontorio se continua por un paso muy estrecho, que bordea el precipicio por el lado izquierdo de la quebrada Esta vía da acceso a otro valle, en él se consigue con varias lagunas, luego de bajar hasta el fondo del mismo, se camina en travesía por senderos de inigualable belleza, parajes con ningún impacto humano en los que se observa la flora y la fauna diversa y en gran número, si bien escasa de grandes animales, en cuanto a pequeños y microfauna es rica y abundante. Los páramos merideños permiten al visitante disfrutar de diferentes especies de plantas por cuanto las rutas se extienden por diferentes pisos altitudinales permite observar la riqueza florística del estado Mérida. Del fondo del valle se asciende por una escarpada cuesta de aproximadamente una hora que permite llegar a la cima, allí la panorámica es impresionante.
Se baja a otro valle en el que se consigue en el fondo la laguna Verde, recibe el nombre por el color verde esmeralda intenso del agua, producto de la reproducción en su ambiente de un alga que por su abundancia y color le imprime al sitio belleza que la diferencia del resto de lagunas del lugar, se prosigue en paralelo al barranco que se consigue a la derecha del caminante, no se recomienda descender por ese lugar, por lo difícil y peligroso de esa vía. Por lo tanto se desciende hasta el depósito de agua, para proseguir por el margen hacia la derecha, buscando el desagüe que origina el río La Mucuy, se consigue el camino en parte empedrado, que se extiende por el fondo del sajón por un tiempo aproximado de tres horas que da acceso a otro valle llamado El Loro, en el la cuenca se abre para y permite la existencia de amplios potreros en los que pastan el ganado vacuno y caballar criados de forma extensiva. En este valle se consigue una antigua y rústica casa de pastores que está en proceso de deterioro, pero que permite el abrigo y resguardo del caminante en su avance hacia la Mucus, el lugar por lo abrigado, condiciones topográficas y distancia del centro poblado más próximo permite el acampado en carpas.
Es oportuno motivar y concienciar a los senderistas para que hagan buen uso y conserven los lugares de acampado que funciona como refugio por cuanto, personas inescrupulosas deterioran esos lugares, dañando los techos, las puertas, dejando restos de hojas de frailejón usadas de cama que contaminan el ambiente del refugio; en el mismo orden de ideas, se observa la práctica negativa del uso de estos refugios como baños; también se precisa la afectación del ambiente por parte de los senderistas en cuanto a que deterioran la flora y la fauna, dejan restos de desechos sólidos en la montaña con as consecuencias negativas que se derivan.
Del páramo El Loro se camina por el sendero que sigue la margen izquierda del río La Mucus, este camino está bien demarcado por el que se baja hasta conseguir el paso de este curso de agua a una hora de caminata, se debe tener cuidado en conseguir el lugar apropiado para hacer el paso del río para conectar con el camino que conduce a la carretera de penetración agropecuaria de tierra construido sin considerar en muchos tramos aspectos técnicos básicos por lo que el deterioro es notorio con consecuencias perniciosas e irreversibles en el ambiente del Parque Nacional Sierra Nevada de Mérida; no existen razones técnicas, jurídicas y de otro orden que sustenten el permiso que permitió la construcción de la vía carretera en este parque nacional.
La bajada conduce por un puesto de vigilancia en el que se consigue apoyo de tipo turístico, de seguridad y salvamento, en los márgenes de la carretera se consiguen haciendas productoras de ganado, ¿dentro del perímetro del parque?, se observan vistas del cañón en la parte media del río Chama a nivel de la población de Tabay, Escaguey con vistas impresionantes y diversas. Al acercarse a la población de Tabay el camino de bifurca uno hacia Tabay directo y el otro que baja hasta el sector La Mucuy
El lugar de partida es Mucuchíes población que se recorre hasta el extremo que se corresponde con la salida hacia Barinas, se desvía hacia la derecha por carretera pavimentada que comunica con la aldea Gavidia en el valle de su mismo nombre, desde el inicio de la caminata se disfrutan paisajes hermosos, en los que se observa la actividad tradicional de los habitantes de la comarca en la medida en que se avanza por la carretera; se consiguen casas de diseño colonial español, algunas de las construcciones con más de cien años de data; las actividades agropecuarias de la localidad en la que sobresale la siembra de cultivos de hortalizas y de flores en los que el páramo es principal productor de Mérida y de Venezuela; el valle de Gavidia se distingue por las bellezas escénicas, de clima excelente, con facilidades para el hospedaje de turistas en posadas modestas, que cuentan con los mínimos recursos para hacer agradable la estadía de los turistas, lo más importante, la calidad y el calor de las personas que se manifiesta en el trato y cordialidad a los visitantes.
Se atraviesa el valle de Gavidia para iniciar el ascenso de poco declive que no está bien demarcado y sin señalización en todo el recorrido por lo que es conveniente y prudente informar a las autoridades de INPARQUES, a familiares y amigos la ruta a seguir, la mejor forma de orientarse en el sendero es seguir puntos del relieve que sirven de hitos para avanzar sin riesgos.
Desde la aldea de Gavidia hasta la laguna el sendero está bien demarcado, por lo que el extravío se reduce al mínimo, desde este depósito de agua se asciende por la montaña, se avanza por el lugar sin la existencia del camino, por lo que el próximo punto de referencia es el collado ( ventana) que se observa en dirección sur este del espejo de agua al frente, de este paso natural entre valles se desciende a la laguna de especial belleza, con visuales únicas, la soledad y lo prístino del lugar invita a la oración y reflexión, en este lugar se recomienda acampar para evitar la caminata en la tarde en la que la presencia de la neblina hace proclive la desorientación del senderista y en consecuencia se produce la pérdida en la montaña, la ruta es larga y extenuante por lo que es necesario conservar energías para asumir en buenas condiciones el resto de la jornada.
Al día siguiente se prosigue el esfuerzo, por lo que se avanza por la margen derecho de la laguna buscando el desagüe, en este punto se requiere prestar adecuada atención debido a que es necesario superar la pequeña quebrada, luego se bordea un pequeño promontorio rocoso que semeja un laberinto, algunas personas que desconocen este camino se extravían o se les dificulta el avance por el lugar correcto, luego de rodear el promontorio se continua por un paso muy estrecho, que bordea el precipicio por el lado izquierdo de la quebrada Esta vía da acceso a otro valle, en él se consigue con varias lagunas, luego de bajar hasta el fondo del mismo, se camina en travesía por senderos de inigualable belleza, parajes con ningún impacto humano en los que se observa la flora y la fauna diversa y en gran número, si bien escasa de grandes animales, en cuanto a pequeños y microfauna es rica y abundante. Los páramos merideños permiten al visitante disfrutar de diferentes especies de plantas por cuanto las rutas se extienden por diferentes pisos altitudinales permite observar la riqueza florística del estado Mérida. Del fondo del valle se asciende por una escarpada cuesta de aproximadamente una hora que permite llegar a la cima, allí la panorámica es impresionante.
Se baja a otro valle en el que se consigue en el fondo la laguna Verde, recibe el nombre por el color verde esmeralda intenso del agua, producto de la reproducción en su ambiente de un alga que por su abundancia y color le imprime al sitio belleza que la diferencia del resto de lagunas del lugar, se prosigue en paralelo al barranco que se consigue a la derecha del caminante, no se recomienda descender por ese lugar, por lo difícil y peligroso de esa vía. Por lo tanto se desciende hasta el depósito de agua, para proseguir por el margen hacia la derecha, buscando el desagüe que origina el río La Mucuy, se consigue el camino en parte empedrado, que se extiende por el fondo del sajón por un tiempo aproximado de tres horas que da acceso a otro valle llamado El Loro, en el la cuenca se abre para y permite la existencia de amplios potreros en los que pastan el ganado vacuno y caballar criados de forma extensiva. En este valle se consigue una antigua y rústica casa de pastores que está en proceso de deterioro, pero que permite el abrigo y resguardo del caminante en su avance hacia la Mucus, el lugar por lo abrigado, condiciones topográficas y distancia del centro poblado más próximo permite el acampado en carpas.
Es oportuno motivar y concienciar a los senderistas para que hagan buen uso y conserven los lugares de acampado que funciona como refugio por cuanto, personas inescrupulosas deterioran esos lugares, dañando los techos, las puertas, dejando restos de hojas de frailejón usadas de cama que contaminan el ambiente del refugio; en el mismo orden de ideas, se observa la práctica negativa del uso de estos refugios como baños; también se precisa la afectación del ambiente por parte de los senderistas en cuanto a que deterioran la flora y la fauna, dejan restos de desechos sólidos en la montaña con as consecuencias negativas que se derivan.
Del páramo El Loro se camina por el sendero que sigue la margen izquierda del río La Mucus, este camino está bien demarcado por el que se baja hasta conseguir el paso de este curso de agua a una hora de caminata, se debe tener cuidado en conseguir el lugar apropiado para hacer el paso del río para conectar con el camino que conduce a la carretera de penetración agropecuaria de tierra construido sin considerar en muchos tramos aspectos técnicos básicos por lo que el deterioro es notorio con consecuencias perniciosas e irreversibles en el ambiente del Parque Nacional Sierra Nevada de Mérida; no existen razones técnicas, jurídicas y de otro orden que sustenten el permiso que permitió la construcción de la vía carretera en este parque nacional.
La bajada conduce por un puesto de vigilancia en el que se consigue apoyo de tipo turístico, de seguridad y salvamento, en los márgenes de la carretera se consiguen haciendas productoras de ganado, ¿dentro del perímetro del parque?, se observan vistas del cañón en la parte media del río Chama a nivel de la población de Tabay, Escaguey con vistas impresionantes y diversas. Al acercarse a la población de Tabay el camino de bifurca uno hacia Tabay directo y el otro que baja hasta el sector La Mucuy
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