domingo, 1 de junio de 2008

CAMINATA EL MANZANO ALTO LAS CANALEJAS ALDEA LAS GONZALEZ PARAMO DE LOS CONEJOS SIERRA LA CULATA MERIDA VENEZUELA




















































































































































































































































































































































































































































































































































































































































RUTA EL MANZANO ALTO (EJIDO) - PARAMO DE LOS CONEJOS ( ALDEA LAS GONZALEZ) MERIDA VENEZUELA.

Paraje con diversos pisos ecológicos en los que se observa la riqueza de la fauna, la flora y el suelo; clima, paisajes y actividades humanas. En lo histórico la ruta presenta aspectos de interés para su estudio en temas resaltantes: sociales, económicos, turísticos que se desarrollan desde la conquista, por lo que se justifica decretar este camino como patrimonio cultural.

En la actualidad el camino ha perdido importancia como vía de transporte de productos y de personas por varias razones, entre las que se mencionan, la construcción de la vía de penetración rural desde la alcabala Las Cruces. vía Jají, hasta la Aldea Las González en el páramo de los Conejos; la construcción de carreteras principales y la autopista hasta el sur del Lago Mèrida El Vigía.

Los agricultores tienen así alternativas más rápidas, económicas y seguras para transportar sus productos desde y hacia el páramo de los Conejos. El traslado por recuas (grupo de bestias para la carga) implica, mayor costo, mayor tiempo en el traslado, disponer de los animales y su mantenimiento, el deterioro de los productos en el traslado; la dificultad del transito por el camino en la época de lluvias principalmente.

Otra razón importante de la pérdida de importancia del camino es la progresiva y constante disminución de la producción agropecuaria en la zona como resultado de varias causas complejas y estructurales que condujo al éxodo masivo de la población de esos lugares; razones que diferentes trabajos de investigación detallan y profundizan. En el caso que se describe una razón importante es la atracción de la ciudad y sus oportunidades para las personas que provienen de las áreas rurales vecinas.

Otras causas son las carencias de todo orden en algunos casos absoluta y total de servicios públicos a los que se enfrentan los pobladores de ese lugar: vivienda, salud, educación, agua potable, combustibles, distracción, deporte, y los programas del Gobierno hacia la población de menos recursos.

En el mismo orden de ideas está la pérdida de la productividad de los suelos agrícolas por diversas razones, que también han sido estudiado; el poco o ningún empleo de tecnología agropecuaria adaptable, viable y factible para la zona; las restricciones a la agricultura que lo rigurosos del clima impone; otras limitaciones es el aspecto jurídico del marco legal de uso del Parque Nacional Sierra de la Culata.

La ruta que se describe se inicia en la comunidad del Manzano Alto, parte norte de la ciudad de Ejido, en la vía que comunica Mérida con la población de Jají y la Azulita, a veinte minutos de la ciudad de Mérida, por carretera pavimentada en buen estado, que amerita transitar con precaución.

Hasta el Manzano alto llega el transporte público desde muy temprano en la mañana y se mantiene hasta las siete de la noche. Vehículos para el lugar se abordan en el Terminal de pasajeros de la ciudad de Mérida o cerca de la plaza Bolívar en Ejido. En el Manzano Alto se pueden contratar bestias, previa diligencia, para subir la montaña que desde allí es de ascenso pronunciado y largo, sobre todo si los viajeros llevan abundante y pesado equipo, para el ascenso por esta vía se requiere de buenas condiciones físicas y anímicas, ya que viene un acenso fuerte y prolongado hasta el lugar llamado Las Canalejas a dos horas de camino a paso lento, en el transcurso del ascenso se observa la diversidad del paisaje y los pisos ecológicos en los que predomina el bosque nublado con su rica flora y fauna; se tiene perspectiva del cañón del río Chama con vistas espectaculares de parte de la ciudad de Ejido; las montañas de la Sierra Nevada de Mérida. Con el recorrido del camino se observa como los bosques han sido impactados, proceso que se origina en la conquista y que no cesa aun cuando existen serias reglamentaciones para evitarlo.

Desde la Colonia, principalmente, el camino se empleó para la comunicación estratégica de bienes y personas desde: Ejido, la Mesa de los Indios, Jají, Las González, San Juan de Lagunillas desde y hacia el Sur del Lago de Maracaibo, conectando con los caminos de poblaciones como: Arapuey, Tucaní, Santa Apolonia, Torondoy, y de allí a los puertos lacustre de: Palmarito, Gibraltar; puertos menores que a su vez establecían las interfaces con el gran puerto de Maracaibo, desde allí se hacia el trasbordo hacia las rutas del Atlantico: Europa, América del Norte, Centro y Sur.

Esta condición de camino principal llevó a las personas, en un inicio, de manera individual y organizada en comunidades a construir y dar mantenimiento al camino, en el transcurso del tiempo el Estado venezolano ha asumido esa responsabilidad, con resultados nefastos, hasta permanecer el camino en condiciones intransitables. Se construyó amplio, con una cobertura de piedra en algunos lugares, como especies de adoquines a nivel y bien colocados semejantes a los caminos que construía el Imperio Romano; la falta de mantenimiento afecta el camino al punto que el empedrado prácticamente ha desaparecido por lo tanto muchos pasos en la época de lluvia son intransitables.

Para el ascenso es necesario llevar suficiente agua para el consumo de las personas, debido a que hasta las Canalejas no se consigue provisión de la misma. El lugar es precioso con vistas impresionantes del cañón del Chama y de la Sierra Nevada de Mérida, desde este punto el camino sigue en ascenso pero no tan pronunciado, pero si largo y extenuante se atraviesan campos abiertos y campiñas semejantes a los prados europeos; el camino lleva hasta la aldea Las González para lo cual se requieren de cinco horas a paso lento, en el transcurso se consiguen en verano, pequeños caudales de agua apta el consumo humano, los paisajes a cada recodo del camino van cambiando, maravillando al transeúnte, se consiguen riachuelos que forma pozos en los que los viajeros pueden refrescarse si llevan tiempo y deseos de aguantar el agua fría.

Al fondo se llega a un valle profundo y amplio que forma el río Las Gonzáles, el mismo que kilómetros abajo se desempeña en una imponente salto que es llamada la Chorrera y que se observa en al margen de la carretera que conduce hacia Jají a 50 minutos de la ciudad de Mérida. Se divisan casas típicas del diseño de construcción de viviendas del páramo, casas de bahareque, barro pisado con cimientos de piedras, techos de paja de lagunas; en los últimos tiempos estas viviendas se está sustituyendo por casas construidas con bloques y techos de zinc, las que las hace más confortables y livianas, dado el riesgo de violentos sismos que allí ocurren constantemente producto de ubicarse la zona en una falla tectónica. La mayoría de estas viviendas se encuentran desocupadas motivado a las causas que se expusieron con anterioridad, en algunos casos son visitadas por sus propietarios en épocas de trabajo agrícola o vacaciones escolares; están desperdigadas a lo largo y ancho del valle semejando un pesebre dicembrino. Alrededor y cerca de las vivienda se aprecían los cercados de piedras que eran construidos para la división de propiedades, corrales para el ganado, para trillar el trigo, cuando allí se producían cantidades importantes del cereal, que le imprimían al lugar importancia económica, social y política para la toma de decisiones.

Es de aclarar que a partir de los límites del Parque Nacional Sierra de La Culata, el uso del parque para fines agropecuarios se da con base a documentos legales que se originan en la conquista y que se denomina Derechos de Uso de Páramo, que es de carácter hereditario pero reglamentado por el Decreto del parque nacional, los propietarios de estos Derechos pueden aprovecharse del suelo bajo reglamentación y restricciones.

La aldea Las González está a más de tres mil metros sobre el nivel del mar, enmarcada por el sistema ecológico de páramo entre la que destaca la vegetación de arbustos pequeños, pocos o ningún árbol, el frailejón; con temperatura promedio durante el día de de 10 º C que puede disminuir en la madrugada hasta los 4 º C, esta es una limitante, sobre todo para los proyectos agrícolas de muchos cultivos, debido a que en la mañana el agua se congela y cuando se riega la planta sufre hasta morir por cambios en su fisiología (quema). Con respecto al cultivo de la papa, que es el de importancia que queda en la zona, se siembra la variedad criolla por su resistencia a la heladas por lo que se siembra en el tiempo de entrada de las lluvias abril- mayo y dura siete meses de ciclo de cultivo.

La comunidad dispone de dispensario rural, escuela con escolaridad hasta el sexto grado, administrados por dos educadores cada uno con tres grados a su cargo. No tienen servicio de agua potable, de calefacción, aguas negras, la carretera de penetración llega hasta la escuela, en invierno su empleo es precario, solo es recorrida por vehículos de doble tracción.

Desde las González, se continúan varias rutas por diferentes rumbos del páramo de Los Conejos; una de estas rutas es hacia la cueva del oso, laguna del Albarregas, sitio en el que surge el río Albarregas de importancia para el sistema de acueducto de la ciudad de Mérida, la cueva del Diablo, Santa Rosa, la Hechicera, Mérida.

Ruta interesante que parte de la Aldea Las González, sube a mano derecha en la orientación del declive del valle, sube por un camino bien definido hacia el cerro el Campanario, ascenso que se inicia con pendiente bastante fuerte hasta el lomo de estas montañas a una altura superior a los 3000 msnm, desde esta cima se divisan los picos de la Cordillera de La Culata: Pan de Azúcar y la ruta que conecta esta parte del páramo con Mucuchies; por este camino se asciende por cerca de dos horas siempre hacia la izquierda, sin alejarse de la base del cerro El Campanario, que sirve de punto de referencia, en esa dirección se inicia el descenso para llegar al Valle del Campanario, ruta que se identifica con una laguna situada en una hondonada profunda llamada La Negra, se continua bajando siempre en las faldas del cerro El campanario y se llega hasta una laguna tapada de césped en la que se encuentra una pequeña cabaña de bahareque y paja de laguna, este lugar se denomina el Valle del Campanario.

Una ruta que se hace desde este valle: El Campanario – la cuenca de los ríos: Macho y Capaz, se camina por un sendero que baja a mano derecha de la choza de paja buscando el borde del valle, para evitar el lodo, por terreno seco y elevado, se llega al falso de la cerca de alambre que divide el derecho de páramo, se badea una quebrada y se toma a mano izquierda subiendo la ladera de la misma orientación, considerando el valle en su orientación de descenso. Se recorre la ladera ascendiendo pero en travesía, para lo cual se orienta con piedras grandes que se consiguen por el camino a una hora de camino se llega a un promontorio desde donde se divisa la cuenca de los ríos Capaz y el Macho, desde allí se cruza hacia la izquierda siempre bajando, la ladera de la montaña está cubierto por infinita cantidad de piedras, algunas con pequeñas rocas sobre ellas, que sirven de punto de referencia para orientarse en los momentos en que la neblina impide ver los puntos de apoyo ubicadas a la distancia. Siguiendo este sendero se consigue a mano derecha del caminante una laguna llamada La Blanca se continua bajando y nuevamente a la derecha del transeúnte se divisa una roca inmensa de más de 10 m de alto y 4 m de ancho; a partir de esta inmensa roca, que es la única de ese tamaño, se baja desviándose hacia la derecha del viajero para llegar al borde de la ladera, se desciende abruptamente encontrando una barrial, se atraviesa el mismo con dirección a la derecha del excursionista, atravesado el barrial se procede a subir la montaña buscando la derecha hasta encontrar una planada en forma de potrero, libre de árboles grandes como consecuencia de varios incendios forestales que la devastaron, se consigue un camino bien definido que lleva hacia la cuenca del Macho Capaz, la ruta bordea la montaña que se encuentra a la derecha del caminante con respecto al sajón que cada vez se torna más profundo, el camino entonces va en paralelo a dicho sajón, siempre a la derecha del viajero, por allí se alcanzan inmensas praderas despejadas de árboles empleadas para el pastoreo de bovinos, es de destacar que en este lugar a partir de la laguna la blanca se observó con abundancia y data reciente, los rastros dejados por uno o varios osos frontinos ( de lentes) alimentándose de una variedad de piñuela que crece en los paramos, a campo abierto, no en los árboles, por lo que el animal se arriesga a salir a campo en donde es fácil presa de los cazadores furtivos, que inventan cualquier historia para justificar la matanza, a ese respecto las autoridades no efectúan el respectivo seguimiento, permaneciendo el delito sin la sanción, lo que motiva a otras personas a continuar cazando osos frontinos; al llegar al Macho – Capaz nos enteramos que hacía veinte días habían matado a una osa parida, del osesno no supimos nada en el lugar de las lagunas se observó muchos desechos de estiércol de conejos, en abundancia, lo que atrae a aves de rapiña como lo es el águila real, del cual apreciamos un espécimen en vuelo de caza.
Se atraviesan varios cercados, siempre bajando, para llegar al bosque nublado en el que se observan árboles de gran altura y de mucha antigüedad, rica flora y fauna, este bosque es estratégico para la funcionalidad ecológica y ambiental de la cuenca de los ríos del Capaz y del macho, en consecuencia las instituciones e instancias responsables debe protegerlas a como de lugar de la actividad de deforestación, que alli se observo la tala y saque de madera; se llega a la carretera de penetración rural que da acceso a las haciendas ganaderas que abundan allí, este camino se comunica con la carretera principal del la cuenca del Macho- Capaz, recorriendo aproximadamente 20 minutos, para conectarse con la carretera que va desde Mérida a la Azulita, desde donde se prosigue viaje hacia La Azulita o hacia Mérida. Se observo en algunas haciendas sobre – pastoreo con deterioro de la vegetación y del suelo. La quema por diferentes razones en esos lugares es impresionante, la vegetación arde sin control.

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